Nuestro héroe y comandante
Bolognesi… ya reposa
en la poética glosa
de nuestro Perú radiante.
Con ese sol de diamante
que cubrió su cielo raso
pudo vencer al ocaso
del miedo con valentía;
y pudo, ese medio día,
vencer de muerte al fracaso.
Quemó el último cartucho
en esa triste batalla
y se llevó la medalla
del patriotismo más ducho.
Nuestro Perú sufrió mucho
(de manera inexorable)
la muerte de un honorable
soldado que quiso ser
un emblema –sin querer–,
y fue tan inalcanzable.
Fue su coraje un asalto
al heroísmo banal.
En la batalla campal
le puso al temor un alto.
Su presencia es el asfalto
espiritual de grandeza
y su mirada es firmeza
que a los soldados inspira,
porque la patria respira
su nombre con fortaleza.
Epílogo:
¡Bolognesi! Mi respeto,
mi palabra y mi canción
se escriben con emoción
en un mundo tan inquieto.
¡Todo pasa! Y el secreto
de ser héroe clarifica
aquello que no se explica
con palabras sin acciones,
porque son las emociones
donde tu fuerza se ubica.
lunes, 18 de junio de 2018
La poesía salvaje
Si quieres ser creativo,
no egolatres la razón;
siente como el corazón
naufraga en lo sensitivo.
Asume que estás cautivo
en sabia naturaleza,
y su viento despereza
la magia de cada verso
para que vivas inmerso
en metáfora y belleza.
Que un torrente de lectura
—con el correr de los años—
te lleve a mares extraños
donde llega la locura.
El poeta se apresura
a burlar ese paisaje
de falso aplauso y salvaje
gusto por el amiguismo,
que nos lleva al facilismo
y a un triste emperifollaje.
ZAÑA
Nombrada Villa Santiago
Tus potajes, tus manjares
se conozcan por doquier,
y las manos de mujer
te cubra de los penares.
Que las aguas de los mares
lleven al mundo tu historia
si se viene a la memoria
Toribio de Mogrovejo,
el santo de buen consejo
que te bendice y da gloria.
Zaña… vive en mí el futuro
el pasado y el presente,
el garbo firme y latente
y la fe…. ¡Yo te lo juro!
Mi inspiración apresuro
en noviembre calendario
Esta décima se publicó en el libro «Con aromas de mujer».
de Miraflores de Zaña,
hoy tu historia es una hazaña
contada a orillas de un lago.
Quiero darte como halago
un verso con gentileza
por tu preciada belleza
y tu tradición querida,
que le da a la gente vida
estirpe, orgullo y grandeza.
En las sombras del Corbacho
ya se baila el Golpe Tierra,
y todo tu pueblo encierra
alegrías de muchacho.
Que toque Tana, ¡caracho!
y recite Brando Briones,
y que silben los gorriones
décimas de tradición
de Leyva, Colchado… al son
de guitarras y cajones.
hoy tu historia es una hazaña
contada a orillas de un lago.
Quiero darte como halago
un verso con gentileza
por tu preciada belleza
y tu tradición querida,
que le da a la gente vida
estirpe, orgullo y grandeza.
En las sombras del Corbacho
ya se baila el Golpe Tierra,
y todo tu pueblo encierra
alegrías de muchacho.
Que toque Tana, ¡caracho!
y recite Brando Briones,
y que silben los gorriones
décimas de tradición
de Leyva, Colchado… al son
de guitarras y cajones.
Tus potajes, tus manjares
se conozcan por doquier,
y las manos de mujer
te cubra de los penares.
Que las aguas de los mares
lleven al mundo tu historia
si se viene a la memoria
Toribio de Mogrovejo,
el santo de buen consejo
que te bendice y da gloria.
Zaña… vive en mí el futuro
el pasado y el presente,
el garbo firme y latente
y la fe…. ¡Yo te lo juro!
Mi inspiración apresuro
en noviembre calendario
donde en el pulcro santuario,
con semillas de esperanza,
nacerán flores de alianza
vistiendo tu aniversario.
con semillas de esperanza,
nacerán flores de alianza
vistiendo tu aniversario.
Esta décima se publicó en el libro «Con aromas de mujer».
domingo, 17 de junio de 2018
Hojas de otoño
Mis madres son hojas de otoño
y huelen a cerezas.Me perfuman el alma con sus caricias
y están en cada metro cuadrado de mi historia:
ellas se vuelven más madres
cuando asoman su voz a mi almohada.
Mis madres perfumaron los cafés,
los panes, las mantequillas
con su humildad más profunda.
Me sentaron a su mesa parlanchina.
Me dieron lo que era suyo en ese entonces: el tiempo.
Mis madres serán soles de afecto,
lunas de comprensión,
eternidades de nombre.
Nunca sabrán de mis pasos,
de mis fotografías de hogar.
Ellas no necesitan mi decir: son eternas.
Siguen esperándome en esa casa,
en esa misma mesa donde estuvimos...
Me dirán cuántas veces fui su pequeño,
yo les diré que nunca me separé de su regazo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
COMBUSTIÓN
Mis versos son incas ufanos, cielos peruanos en combustión; liberación desgarradora; el día y la hora cuando yo emigro has...
-
Nuestro héroe y comandante Bolognesi… ya reposa en la poética glosa de nuestro Perú radiante. Con ese sol de diamante que cubrió su ci...
-
Victor Hugo Parraguez, poeta de tradiciones, transitas por las veredas de los mundos venideros. Eres un poeta cholo, de choledade...
-
Mis versos son incas ufanos, cielos peruanos en combustión; liberación desgarradora; el día y la hora cuando yo emigro has...